Dermatología Clínica Avanzada
Nos comprometemos a proporcionar un cuidado integral y compasivo, enfocándonos en la salud y el bienestar general de nuestros pacientes. Ya sea que busques soluciones para una afección crónica o tratamientos estéticos para mejorar la apariencia de tu piel, estamos aquí para ayudarte a lucir y sentirte mejor.
Acné
El acné es una afección de la piel común que ocurre cuando los folículos pilosos se obstruyen con aceite y células muertas de la piel. Esta condición puede causar puntos blancos, puntos negros o granos y suele aparecer en la cara, la frente, el pecho, la parte superior de la espalda y los hombros. El acné es más frecuente entre los adolescentes, aunque puede afectar a personas de todas las edades.
Rosácea
La rosácea es una enfermedad crónica de la piel que se caracteriza por el enrojecimiento persistente de la cara, la aparición de pequeños vasos sanguíneos visibles y, en algunos casos, protuberancias similares al acné. Comúnmente afecta a las mejillas, la nariz, la barbilla y la frente. Los desencadenantes de la rosácea incluyen la exposición al sol, el estrés, el consumo de alcohol, los alimentos picantes y las temperaturas extremas.
Melasma
El melasma es una afección cutánea caracterizada por la aparición de manchas oscuras y decoloradas en la piel, especialmente en áreas expuestas al sol como la cara, el cuello y los antebrazos. Es más común en mujeres, particularmente durante el embarazo o al usar anticonceptivos hormonales, debido a su asociación con cambios hormonales. La exposición al sol y factores genéticos también contribuyen al desarrollo del melasma.
Cáncer de Piel
Lunares
Los lunares, también conocidos como nevos, son pequeñas concentraciones de células pigmentadas llamadas melanocitos que aparecen como manchas de color marrón, negro o a veces rojizo en la piel. Generalmente son inofensivos y pueden estar presentes desde el nacimiento o desarrollarse a lo largo de la vida, especialmente durante la infancia y la adolescencia. Aunque la mayoría de los lunares son benignos, es importante monitorear su apariencia, ya que cambios en su tamaño, forma, color o textura pueden ser indicativos de melanoma, un tipo de cáncer de piel.
Alopecias Femenina y Masculina
La alopecia, tanto masculina como femenina, se refiere a la pérdida de cabello en el cuero cabelludo o en otras partes del cuerpo. En los hombres, la alopecia androgenética, conocida como calvicie de patrón masculino, se caracteriza por un retroceso en la línea del cabello y la pérdida de cabello en la coronilla. En las mujeres, la alopecia androgenética o calvicie de patrón femenino suele manifestarse como un adelgazamiento general del cabello en la parte superior de la cabeza, con una línea del cabello que se mantiene.
Dermatitis Atópica y Seborreica
La dermatitis atópica y la dermatitis seborreica son dos formas comunes de inflamación crónica de la piel. La dermatitis atópica, también conocida como eczema, se caracteriza por piel seca, prurito intenso y erupciones rojas que pueden supurar y formar costras. Es más frecuente en niños, aunque puede persistir en la adultez, y a menudo se asocia con otras condiciones atópicas como el asma y la rinitis alérgica. La dermatitis seborreica, por otro lado, se manifiesta con parches escamosos, enrojecidos y con picazón, principalmente en áreas ricas en glándulas sebáceas como el cuero cabelludo, la cara y la parte superior del cuerpo. Mientras que la causa exacta de la dermatitis atópica no se conoce, se cree que es una combinación de factores genéticos y ambientales. La dermatitis seborreica está vinculada a una sobreproducción de sebo y a la presencia del hongo Malassezia.
Psoriasis
La psoriasis es una enfermedad autoinmune crónica que causa una rápida acumulación de células en la superficie de la piel, formando escamas gruesas, plateadas y parches rojos que provocan picazón y, a veces, dolor. Estos parches, llamados placas, suelen aparecer en el cuero cabelludo, codos, rodillas y parte baja de la espalda, aunque pueden afectar cualquier parte del cuerpo. La psoriasis puede variar en severidad, desde unas pocas manchas hasta erupciones importantes que cubren áreas extensas.